«Meditar es la posibilidad de sacarse literalmente la armadura.. Meditar afloja la mirada externa para entrar en la mirada del sí mismo, nuestras defensas se relajan y podemos reconocer otra profundidad dentro de nosotros».
Jessica Walker
La Escuela nace para experimentar a Dios muchas veces al día, hasta que el día sea sólo Dios.
Sentarnos en un espacio tranquilo en beneficio del silencio y la oración.
Experimentar el rezo en solitario y en comunidad.
Aprender a sentarnos por largos espacios de tiempo a observar al sujeto que se sienta y entrar de manera paulatina en la meditación, que todo lo vacía.
Habitar espacios de contemplación.
Explorar este espacio de forma abierta desde el silencio, japa, canto, poesía, nutrición, yoga, movimiento e inmovilidad.
Hablar de Dios y con Dios, de manera creativa, lúdica y consciente.
Abrir un espacio de silencio, rezo y meditación genuino y sencillo, donde todos los que se sientan llamados puedan venir, aunque no tengan ninguna experiencia en meditar.
Entablar una relación con lo divino, cotidiana y directa.
Te esperamos.
«Siempre brillamos
brillamos ahora
y volveremos a brillar».
Sat Chit Ananda
Existencia. Conciencia. Bienaventuranza.